Mediante el diseño de sistemas de iluminación, diseñadores e ingenieros de iluminación inteligente pueden lograr importantes rendimientos energéticos en una variedad de tipos de edificios.
Se espera que el mercado total de automatización y controles de iluminación alcance los 5.548 mil millones de dólares para 2023 con una tasa media de crecimiento anual del 9,04% de 2014 a 2022. Este mercado en 2013 estaba valorado en 2.778 mil millones de dólares. Actualmente ocupa un papel muy importante que además va creciendo debido a la capacidad que ofrecen dichos sistemas para integrar en ellos los controles de otras funciones del edificio.
La iluminación es típicamente una de las mayores cargas de energía en cualquier edificio, e históricamente ha sido la más difícil de controlar. Le gente enciende las luces pero se olvida de apagarlas. Pero la tecnología se ha vuelto más eficaz en la lucha contra esto.
Historia de los sistemas de control de iluminación
La primera revisión del interruptor simple de encendido y apagado de pared llegó en forma de una rueda o barra deslizante de pared para la atenuación de incandescencia, que ya permitía ahorrar al poder seleccionarse niveles intermedios de iluminación. Entonces, en medio de la crisis energética de la década de 1970, los primeros sensores de ocupación llegaron al mercado. Ya no eran solo los seres humanos el único factor determinante de si las luces estaban encendidas o no, las máquinas empezaron a decidir. Se empezaron a conectar detectores de presencia independientes y temporizadores a los dispositivos de iluminación que apagaban las luces cuando no se detectaba ocupación por un cierto periodo de tiempo, o cuando el tiempo del reloj programador lo marcaba. Esta innovación supuso una enorme mejora respecto al interruptor manual, llevando aparejadas enormes reducciones en las cargas por iluminación.
Luego llegaron los controles de iluminación basados en redes, que controlaban zonas de iluminación creando franjas horarias sobre los controles independientes e interruptores manuales, apagando todas las luces en el edificio en un momento determinado, anulando los interruptores y los controles independientes.
La última versión, el sistema de control avanzado de iluminación, aprovecha el poder de la digitalización y la gradualaridad. Cuando se implementan correctamente, estos sistemas son fáciles de usar y fáciles de mantener, proporcionan la capacidad para gestionar eficazmente todas las luces de un edificio desde una única ubicación centralizada, y agilizan el mantenimiento físico y el funcionamiento.
El control de la iluminación basado en software también permite el intercambio de datos no sólo entre los componentes del sistema de control de iluminación, sino también con los sistemas mecánicos, de seguridad contra incendios y de seguridad.
Esta integración de sistemas inteligentes permite la gestión eficaz de todos los consumidores de energía del edificio para conseguir una verdadera reducción del uso energía y ahorro de costes.
Escepticismo por parte de algunos los responsables técnicos
A pesar de los beneficios, muchos ingenieros no entienden realmente los sistemas de control de iluminación avanzados. Esto puede deberse a la naturaleza global del sistema que puede parecer compleja y abrumadora, y los ingenieros a menudo simplemente no se han tomado el tiempo para aprender acerca de él.
El término «sistema de control avanzado de iluminación» puede sonar complicado, pero lo que realmente significa es que se esta realizando una adaptación de los interfaces de comunicación sobre un hardware común que los ingenieros ya han utilizado tradicionalmente y que con el que se encuentran bastante familiarizados -balastos, lámparas, sensores de ocupación, y otros dispositivos de control – o bien puede que se esté utilizando un tipo particular de este equipo.
A menudo, los diseñadores no se dan cuenta de que familiarizarse con los sistemas de control de iluminación avanzados les puede ahorrar tiempo y energía en el largo plazo.
El hardware es más o menos el mismo de siempre; el verdadero cambio y el progreso reside en los sistemas de software.
En nuestra escuela disponemos de cursos sobre software avanzados de control, y la gestión, el consumo y la gestión lumínica necesaria de cada momento del día.